Control de Linepithema humile (hormiga argentina)

Entre las hormigas invasoras, la hormiga argentina es una de las más extendidas y dañinas, con capacidad para desarrollar súper poblaciones y un alto potencial para generar daños ecológicos y económicos. A diferencia de la mayoría de las especies que sólo tienen una reina, la linepithema humile puede tener varias (poliginia), multiplicando sus colonias. Son extremadamente difíciles de erradicar, por lo que compartimos algunas medidas para su control.

Las hormigas invasoras son consideradas plagas tanto en áreas agrícolas como urbanas. A pesar de una larga historia de esfuerzos de control y erradicación, las hormigas invasoras siguen extendiéndose por todo el planeta impulsadas por multitud de factores sinérgicos. Muchas especies tienen poblaciones poligínicas de alta densidad y las colonias suelen anidar en lugares inaccesibles que están protegidos de las aplicaciones directas de plaguicidas. En ocasiones el insecticida se aplica en zonas donde se espera que las hormigas aniden y/o busquen comida. Las obreras que buscan alimento visitan posteriormente las zonas tratadas y translocan el insecticida a otros miembros de la colonia, especialmente a los individuos que no buscan alimento (reinas) o que no pueden buscarlo (larvas) de forma independiente. Sin embargo, la mayoría de los tratamientos con insecticidas sólo controlan directamente a una pequeña proporción de la población, por lo que el control suele ser incompleto y son frecuentes los rebrotes. Es primordial buscar mejorar la eficacia y seguridad de la gestión de las hormigas y desarrollar estrategias de control eficaces.

Identificación
Las linepithema humile son monomorfas. Las hembras estériles miden entre 2 y 3 mm de largo y son de color pardo con el tórax, el primer artículo de las antenas y las patas algo más pálidas, siendo la mandíbula amarillenta. Sus antenas son acodadas y poseen el primer segmento más largo que el siguiente. La cabeza es más ancha que el tórax y tiene antenas de 12 artejos. El pecíolo está construido por un segmento. El tórax visto de costado no es regular en su parte dorsal y no tiene dientes en su parte superior. Las patas no son extremadamente largas y guardan proporción con el cuerpo. El escapo no es más largo que la cabeza. El macho es similar en tamaño a la obrera o levemente más pequeño, siendo su color similar al de la hembra.


La hembra fértil o reina es de mayor tamaño (4,5 a 5 mm). El color es castaño oscuro, siendo las antenas, patas y márgenes posteriores de los segmentos del gáster rojizos, mientras que las mandíbulas, suturas del tórax y articulaciones de las patas son de color amarillento. Tiene alas cuando no está apareada y tras el apareamiento, se quita las alas y deja cicatrices. Posee tres ocelos (ojos simples) situados en la parte superior de la cabeza.

La reproducción de L. humile es sexuada, los machos vuelan, buscan a las hembras dentro de otros nidos y se aparean con las reinas sin que éstas se vean expuestas a los riesgos externos. El ciclo de vida de la hormiga argentina comienza por el huevo, luego pasa por dos estadios larvales, pupa y finalmente adulto, desarrollo que demora entre 75 y 80 días.

Control
La gestión eficaz de las hormigas invasoras se ve limitada por una serie de factores, muchos de ellos relacionados con su estructura social y espacial. La alta densidad y la naturaleza interconectada de las supercolonias es un impedimento importante para su control eficaz, aunque también puede ofrecer oportunidades para mejorar los enfoques de gestión.

En Argentina no existen enemigos naturales, por lo que los métodos de control se ven limitados a manejos químicos. Las intervenciones convencionales se han basado principalmente en el uso de insecticidas químicos, aplicados como tratamientos residuales de contacto alrededor del perímetro exterior de las estructuras infestadas.

Las vías de ingreso de los productos químicos al organismo de los insectos pueden ser por contacto, ingestión o inhalación y precisamente las formulaciones de hormiguicidas desarrolladas utilizan esta característica para incorporar los principios activos y exaltar su modo de acción insecticida. Los productos en base a los diferentes principios activos tienen diversos modos de acción, lo que se debe tener en cuenta al momento de plantear un programa de control.

Para el control de la hormiga argentina (Linepithema humile), se pueden utilizar varios tipos de insecticidas. Algunas de las opciones más comunes incluyen:

Insecticidas en forma de cebo: Estos son muy efectivos para el control de hormigas, ya que las obreras los llevan de regreso al nido y los comparten. Los ingredientes activos comunes incluyen el sulfluramida, el hidrametilnon y el fipronil. El sulfluramida es un inhibidor de la enzima acetilcolinesterasa, interfiere con la transmisión de señales nerviosas en los insectos al bloquear la acción de la acetilcolina, un neurotransmisor importante. Esto lleva a la parálisis y, finalmente, a la muerte de los insectos expuestos.

Mirex Glex® es un insecticida-hormiguicida formulado con sulfuramida 3%, en formato cebo granulado. Posee un poder atractivo, lo que determina que las hormigas tomen los gránulos y los lleven al interior del hormiguero, provocando en pocos días el control de la colonia. Su acción es lenta (3 a 5 días) y esta es la razón por la cual no es rechazado inmediatamente por la colonia de hormigas.

Insecticidas líquidos: estos pueden ser utilizados para tratar áreas específicas donde se encuentren las hormigas. Pueden ser aplicados directamente en los senderos o cerca de sus nidos. El uso de piretroides y organofosforados permite un control eficiente en aplicaciones del tipo pulverización, con un efecto residual que garantiza el control.

La deltametrina es un piretroide con una molécula con muy buena capacidad insecticida y efecto de volteo. Posee una gran acción de desalojo, importante en áreas donde la localización de los insectos resulta compleja. Una vez diluido en agua en las dosis recomendadas, no produce irritación. Por tratarse de un piretroide estable, su residualidad es sumamente aceptable, dependiendo fundamentalmente de las condiciones de intemperie y de la superficie tratada.

En la familia de los organofosforados, el pirimifos metil es un ingrediente activo que afecta directamente al sistema nervioso por inhibición de la colinesterasa, ingresando a la plaga por contacto, ingestión o por vía respiratoria.

Algunos insecticidas ya vienen formulados con una combinación de ingredientes activos que garantizan un excelente efecto insecticida y residual, actuando sobre distintos estadios, controlando eficazmente aquellos juveniles (huevos/larvas) y adultos. El Pulex®, combina pirimifos metil, perteneciente a la familia de los organofosforados, activo que ejerce su acción inhibiendo el acetil colinesterasa, y lufenuron, que es una benzoilurea que regula el crecimiento (IGR) de los insectos, inhibiendo la síntesis de quitina.

Insecticidas en aerosol: estos también pueden ser efectivos para el control de hormigas en interiores, ya que pueden alcanzar nidos inaccesibles con otros tratamientos. Algunos aerosoles contienen piretroides como ingrediente activo, en combinación con butóxido de piperonilo, potenciando la eficacia del insecticida al aumentar su toxicidad. El butóxido de piperonilo actúa inhibiendo las enzimas del sistema nervioso de los insectos, lo que les impide metabolizar y eliminar eficazmente los insecticidas a los que están expuestos.

Niebla® es un aerosol insecticida de amplio espectro provisto con una válvula de descarga total. Su fórmula está compuesta por tres piretroides que garantizan un excelente efecto de desalojo, gran capacidad de volteo y buen poder insecticida: deltametrina + tetrametrina + bifentrin.  Posee también butóxido de piperonilo en su composición, sinergista que confiere mayor eficacia, debido a la inhibición que produce sobre las enzimas detoxificantes de insecticidas.

El butóxido de piperonilo es un sinérgico de plaguicidas. Si bien no tiene propiedades insecticidas, al combinarse con piretroides, potencia la acción del activo considerablemente. Actúa inhibiendo los mecanismos de detoxificación del insecto, lo que permite que las concentraciones del activo dentro del organismo sean mayores, impidiendo su metabolización y logrando que permanezca más tiempo dentro del cuerpo del insecto.

Insecticidas en polvo: Los polvos insecticidas pueden ser esparcidos en áreas donde las hormigas están activas, como grietas y hendiduras. Estos polvos suelen contener ingredientes activos como el diazinón o el bórax.

En general, es importante abordar el control de la hormiga argentina de manera integral, combinando diferentes métodos de control químico con medidas preventivas, como la eliminación de posibles fuentes de alimentación. En caso de plagas tan complicadas, el concepto de disminución de la población en su número de individuos, es al que se refiere el término “control de la plaga”, dado que su total eliminación podría impactar en el ecosistema.

Tomá el control de las plagas con

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